Cuán importantes son en pleno siglo XXI la tecnología, el I+D, la informática, el control …. pero estamos dentro de un sector donde, además de todos esos factores, debemos contar con nuestra más preciada maquinaría: el factor humano.

Dentro de todos los aspectos antes descritos, nada sería factible sin la intervención de un equipo de personas que tratan y gestionan todos y cada uno de nuestros envíos, que mantienen relaciones estratégicas con proveedores, con clientes, con agentes, y que, además, deben saber coordinarse internamente con otros departamentos de la propia empresa.

Por eso las personas son nuestro valor más preciado. Los compañeros, el EQUIPO hacen que nuestra maquinaría se acerque a la perfección y, cuando no la conseguimos por esa condición humana a la que pertenecemos, desde la humildad sabemos reconocer nuestros fallos, desde la profesionalidad sabemos ir a la raiz de los mismos y desde la seriedad ponemos las soluiones necesarias para que no se vuelvan a producir.

Muchos son los factores que intervienen en el transporte de un envío, pero sólo la conjunción de muchos elementos hacen que la satisfacción con el servicio sea el éxito a conseguir: nuestra meta.

Nuestro factor humano es nuestro orgullo y el motor de nuestro día a día, y él mismo debe adaptarse al cambiante mundo del transporte internacional de mercancías y a las exigentes necesidades que nos ponen los mercados y que obliga a nuestros clientes a buscar en nuestra organización el mejor ensamblaje para hacer de ambos, empresa-TransNatur, un sólo equipo, un mismo tandem que nos permita seguir ocupando un hueco en el difícil escenario del transporte internacional de mercancías.

Formación, comunicación, compañerismo, estrategia y planificación es lo que hace que NUESTRO FACTOR HUMANO sea mejor cada día. Sigamos, pues, en esa línea; sólo los que nos esforcemos en mantenerla, podremos disfrutar de nuestro trabajo y satisfacer las necesidades de clientes y mercados.